La Industria ¡Feliz aniversario...!: Testimonio personal en síntesis

Histórico testimonio gráfico. Plana de redacción del diario La Industria en 1964. Al fondo, de pie, Héctor Alva Centurión, jefe de redacción. El primero de la

izquierda es el autor de este blog.

          Todos tenemos una historia que contar.

          Si me pidieran que relatara la mía, tendría que relacionarla con el diario La Industria que está de aniversario.

          Conocí sus instalaciones desde muy pequeño. Cuando estudiaba a media cuadra, en la escuela 280. Juan Gálvez Arce, mi padre, trabajó allí.       

          Era la época de la tipografía. De unir a mano letra por letra las palabras. Del teletipo, el cliché, la rotoplana y las fotos, con rollo, en blanco y negro.

          Armar y publicar cada día el periódico era una verdadera proeza.

          Siendo estudiante de la Universidad de Trujillo para graduarme de profesor, el director Daniel Gordillo Jara me llamó como redactor.

          Antes, como corrector de pruebas, había escrito algunos artículos que fueron publicados con mi nombre.

          Me asignaron una máquina de escribir Olivetti de la que aún guardo una foto en plena actividad.

          Allí aprendí que la noticia debe ser objetiva, imparcial, contrastada y que los periodistas tenemos hora de ingreso, pero no de salida.

          Habían llegado ya los linotipos que producían las columnas en plomo y una flamante rotativa.

          En 1967, al incorporar don Vicente Cerro Cebrián el offset integral, La Industria revolucionó el sistema de imprimir periódicos en el Perú.

          Todo se hacía más rápido. Los redactores abandonamos las carillas por el papel milimetrado que facilitó la diagramación de las páginas.

          Eso, motivó la aparición de Satélite, como periódico de la tarde, al igual que otros que llegaban desde Lima.

          El destino me llevó a trabajar también en este vespertino caracterizado por abrir con el último acontecer de la mañana.

          ¡Feliz aniversario a La Industria...! Cómo olvidar esa casa editorial donde aprendí a escribir a máquina, me hice periodista y conocí a mi esposa.

          Con el paso del tiempo comprobé que, para mí, es imposible vivir indiferente al acontecer del día.

          Continúo ligado a la prensa a través de artículos publicados en las páginas editorial y deportes de Satélite.

          Por las mañanas, alterno durante dos horas en el radioperiódico Réplica, de Diplomat Radio, con Víctor Gil y Helen Viera.

          Y escribo mi blog Prensa Virtual Trujillo. Si todo eso fuera una obligación y no una pasión y una forma de aportar, no lo haría...