erJUn día antes del voto de confianza otorgado por el Congreso al gabinete, el gobierno decretó el estado de emergencia en Lima y Callao por 30 días.
La situación es diferente a las acostumbradas. Impone restricciones en el régimen de visitas a los penales.
Así mismo, el “apagón electrónico”. Que limita el uso de energía eléctrica dentro de las cárceles solo para iluminar.
La finalidad es impedir la carga de celulares, radios o dispositivos electrónicos y frustrar comunicaciones ilegales desde el interior.
Destaca la estrategia del control territorial para anular las conexiones de las organizaciones criminales.
Falta comprometer al máximo a las operadoras telefónicas y ampliar, lo más pronto, la disposición a las regiones.
El premier Ernesto Álvarez, resume el propósito del gobierno:
"El objetivo primordial no es tratar de ganar una imagen ante la población,. Ni siquiera de evitar protestas. Sino de comprometerse por una lucha contra el crimen “.
“Entendemos que no va a ser superado; pero por lo menos darle los pasos necesarios para evitarlo y permitir que el próximo gobierno complete”, agregó.
Hace poco, en la Dirección de Seguridad del Estado, José Jerí, expresó:
“Las decisiones que se toman siempre serán pensando en el bienestar de la mayoría. Siempre. Aunque a algunos no les guste”.
En efecto, ante la indiferencia de Boluarte, que culpaba la criminalidad a gobiernos anteriores, existen muchos escépticos.
Jerí está de paso. Pero, denota interés en enfrentar el problema.
Queda brindarle el beneficio de la duda con la esperanza de avasallar a esa bestia que nos acecha día y noche. En todo lugar.
Los peruanos necesitamos que esta breve gestión nos devuelva la paz y tranquilidad. Aquella que nunca debimos haber perdido…
“
No hay comentarios:
Publicar un comentario