Gol de penal de Guerrero. El balón va ingresar por la izquierda. Allison se tira a su derecha y solo atina a mirar. Perdió el invicto. (AFP).
Se
bajó el telón de la Copa América 2019 y Perú ocupó el segundo lugar siguiendo al
campeón: Brasil.
Después
de 44 años la bicolor tuvo el mérito de llegar alto y disputar el título del
más importante evento del fútbol continental.
Tras
cuatro décadas el equipo peruano hizo historia y obtuvo un expectante cartel en
el certamen.
Debemos
reconocer que ayer se perdió en Maracaná frente a un adversario compacto y de
jerarquía.
El
nuestro era un grupo, que al inicio se le otorgaba muy poco. Sin embargo,
alcanzó triunfos importantes y nos colmó de orgullo y felicidad.
Los
goles en los triunfos ante Uruguay y Chile fueron memorables y hasta nos
hicieron derramar lágrimas.
Aparte
que su juego de toque a ras del césped, velocidad y precisión motivó las
simpatías de las tribunas.
No
hay nada que reprocharle. Al contrario, destacar en la blanquirroja su entrega,
sacrificio y solidaridad.
Y
agradecer todas las alegrías que sirvieron de bálsamo a la sucesión de
sinsabores diarios a nivel nacional y local de los políticos.
Al
final, queda el agrado de haber desempeñado un buen papel y que contamos con un
cuadro base para futuros compromisos,
Recordemos
que sigue la Copa América 2020 para regular su organización a la mitad de los
campeonatos mundiales.
En
especial, las eliminatorias a Catar 2022 que rompen los fuegos en marzo del año
entrante.
Estamos
satisfechos de los jugadores que vistieron la camiseta peruana y todo lo que
nos hicieron sentir.
¡Gracias
Perú...! ¡Gracias muchachos...!
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