Este hoyo está en la esquina de la avenida España. Es un peligro a toda vista.
Las
escuelas Antonio Raimondi y Pedro Ureña son instituciones educativas primarias estatales
que forman parte de la tradición de Trujillo.
En
sus inicios llevaban los números 262 y 241, respectivamente. Tal como lo fueron
en su momento Enrique Guimaraes 280, la 245 y 247.
Raimondi
se denominó al comienzo Escuela de Aplicación. Funcionó a espaldas del Club
Libertad. Se trasladó después a su ambiente frente al Paseo de las Letras.
Hace
cuatro años, sus instalaciones fueron declaradas inhabitables y los estudiantes
fueron encargados en otros locales.
Razones
burocráticas y de otra índole motivaron que su reconstrucción se retrase. Fue
el gobernador regional Manuel Llempén quien concretó la edificación.
El
local quedó expedito y cientos de pequeños colmarán sus aulas a partir de marzo
del próximo año lectivo.
Justo
el lunes último, ante la algarabía general, la edificación fue entregada y
puesta a disposición de las autoridades educativas del plantel.
Sin
embargo, comprobamos que en los exteriores existen pequeñas fallas que deben ser
superadas.
En
la esquina colindante con la avenida España hay una hondonada circular sin
nivelar que constituye un serio peligro para los transeúntes.
Y,
en casi toda la vereda frontal de la escuela, incluyendo la puerta principal,
se aprecian restos de cemento que no fueron recogidos en su oportunidad.
Podría
decirse que son simples errores. Imperceptibles. Perdonables. Es cierto. Pero,
no debieron presentarse. Se paga por un trabajo eficiente.
Restos de cemento regados por toda la vereda que no fueron limpiados a tiempo.
Partamos
del principio que, en toda acción realizada, es importante orientarnos a la
perfección.
Especialmente,
si se trata de una obra recién construida
y, sobre todo, de un centro educativo.
Por
lo demás. Felicitaciones. Sabemos que los más contentos son los alumnos, los
padres de familia y los mismos profesores.
Y,
al gobernador regional. No pierda esa visión de promover la construcción de
escuelas y colegios.
Es
un sector donde el déficit es evidente y el Estado está aún en deuda con los
peruanos...
En la parte baja del grifo contra incendios se aprecia una basura de
construcción que debe ser eliminada.
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