Unos cuantos billetes es el aguinaldo de los jubilados. Los que más ganan, reciben un sueldo completo. ¿Eso es justo...?. (Correo).
La
información se propaló hace unos días en todos los medios de comunicación.
Ocupaba un lugar preferencial.
"Trabajadores
públicos recibirán 300 soles de aguinaldo por navidad", decía el titular.
Añadía
que el Ejecutivo lo oficializó a través del ministerio de Economía mediante
decreto supremo publicado en El Peruano.
Lo refrendaban
las firmas del presidente Martín Vizcarra y María Alva, titular del pliego.
Demasiado
protocolo para el refrito de siempre. La dádiva del 300 soles otorgada a los
trabajadores públicos.
Comprende
a los jubilados del ramo. El sector más relegado y desatendido por todos los
gobiernos. Incluso el actual.
Profesionales
que superviven con una miserable pensión que los margina en el grupo social.
Pavorosa
e increíble realidad que sufren miles, en su mayoría maestros, que dejaron lo
mejor de su vida en las aulas.
Y lo
que es peor. Olvidados por quienes conducen el país y, en un momento de su
existencia, fueron sus alumnos.
Servidores
del Fentase, Sutep, salud, poder Judicial y seguridad ciudadana, hacen huelga.
Reclaman aumentos.
Gritan
que la canasta familiar ha subido. Quieren más. Trabajadores ediles no aceptan
100 soles mensuales.
Los
profesores retirados, con el peso de los años encima y las dolencias que les
pisan los talones, no tienen ya fuerzas para pedir nada.
Se
resignan a las migajas del gobierno. ¿Saben cuánto...? 20 o 25 soles. No al
mes, sino al año. ¡Alrededor de 2 soles mensuales...!
Ellos
no se explican su situación comparada con aquellos que se les entrega un salario
íntegro.
Ese
beneficio es solo para los que ganan mucho más. Lo legal sería darles también
300 soles. Eso es discriminación.
Un vicio
que debe corregirse en el sistema democrático del Perú. Porque aniquila el
principio de igualdad.
Por
eso, para los jubilados, el anuncio del aguinaldo nunca es noticia. Lo será, el
día que reciban un sueldo completo...
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