Correo y Exitosa dedicaron sus portadas a resaltar el reprobable acto del congresista Marco Verde.
Una de las excelsas funciones que ostenta el sistema democrático, es la legislativa.
Por la enorme responsabilidad que significa representar a la ciudadanía y a la nación en su conjunto.
Y, porque al cargo se llega mediante la voluntad popular expresada a través del sufragio.
La investidura exige a los elegidos un ejemplar desempeño en el hemiciclo y en su vida personal. No íntima.
Por esa razón, observar imágenes del congresista Marco Verde libando licor y fumando con sus amigos en Oxapampa, durante la cuarenta, causó estupor y vergüenza.
Acosado por las evidencias, pidió disculpas a la colectividad.
Sin embargo, cuando se instale el olvidado Comité de Ética, debe recibir una severa sanción.
El Perú no necesita esta clase de representantes, sino gente digna y honorable.
Resaltando la gravedad del acto cometido, los diarios Correo y Exitosa dedicaron sus portadas a condenar ese reprobable comportamiento que jamás debe repetirse...
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