sábado, 29 de abril de 2023

Toledo y la informal "hora Cabana": ¡Una detestable costumbre que debemos erradicar de nuestro medio...!

 Toledo, cabizbajo, con su impuntualidad implantó la "hora Cabana".           


            Luego de más de seis años, el expresidente Alejandro Toledo fue extraditado de Estados Unidos.

            Es acusado de corrupción y lavado de activos mediante sobornos pagados por la constructora brasileña Odebrecht a varios políticos

            El equipo especial Lava Jato sostiene que recibió dinero a cambio de licitaciones para obras públicas.

            Le imputa aceptar 35 millones de dólares a cambio de concederle la carretera Interoceánica.

            Al respecto, Toledo sostuvo no percibir “ni un solo dólar mal habido”.

            -- ¿Yo, que he trabajado para ganármelo desde los cinco años...? --declaró.

            Ahora ocupa uno de los ambientes del penal de Barbadillo. Fiscalía pide 20 años 6 meses de cárcel.

            Toledo gobernó el Perú entre el 2001 y 2006. Recibió  al país con la economía saneada. Hoy, tiene 77 años a cuestas.

            Entre otros aspectos, su gestión se caracterizó por no llegar a tiempo a los compromisos. Incluso oficiales.

            Esa negativa actitud la tuvo tan arraigada que hasta se llegó a hablar de "la hora Cabana", en alusión a su tierra natal.

            La frase tenía un complemento: "la hora que al presidente se le da la gana...".

            Sin embargo, preocupa que dicha práctica se mantenga en la actualidad.

            Actos públicos, ceremonias, convocatorias, sesiones y hasta conferencias de prensa, no empiezan a la hora programada.

            Los invitados están presentes al momento indicado. Pero, los oferentes no aparecen por ninguna parte.

            En el ámbito periodístico, fui partícipe de una excepción. La Federación de Tenis organizó una rueda de prensa en El Golf.

            Ingresamos a la sala de sesiones y, sorpresa, en la mesa de honor nos esperaban cinco dirigentes perfectamente ubicados.

            La explicación es clara. Si se invita a alguien, por respeto, el "dueño de casa" debe esperar a quien llegue.

            Sobre la puntualidad, el escritor William Shakespeare solía decir: "Mejor tres horas demasiado pronto, que un minuto demasiado tarde...".

            ¿Han notado que en el Perú las únicas actividades que empiezan a la hora exacta son las misas y los partidos de fútbol...?.

 

 

 

 

 

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