Observen como se reduce la distancia entre la Panamericana sur y las edificaciones colindantes. Es urgente superar esta y otras deficiencias. (Captura video-cámara).
Trujillo
experimentó la semana anterior uno de los más fatídicos accidentes de tránsito
de los últimos tiempos.
Por
causas que se investigan, un camión embistió a un motociclista y una combi
repleta de pasajeros.
Casi
dos decenas de víctimas fue el resultado de la violenta colisión que motivó el
incendio debido a la explosión de un balón de gas.
Al
margen del hecho trágico, que ha sido analizado desde distintas perspectivas,
es oportuno incidir en un aspecto vinculado a las rutas de la región.
El
accidente se produjo en el kilómetro 558 de la carretera Panamericana que tiene
categoría de internacional.
La
vía recorre la costa peruana en toda su extensión. Puede llevarnos a Ecuador o
Chile siguiendo en una u otra dirección.
Hacia
el sur, en sus primeros tramos, sirve también para conducir a localidades
cercanas como Moche, Las Delicias, Salaverry y alrededores.
Por
lo tanto, se trata de una ruta de intenso tránsito que se incrementa con el
transcurrir de los años.
A
raíz del triple choque que ha enlutado a numerosas familias liberteñas, hemos
observado fotos y videos publicados en las redes sociales.
En
ellos se aprecia que, al ser impactada, la combi es impulsada a la derecha y
rompe una pared que estaba muy cerca.
¿Qué
distancia existe entre el filo de la pista y ese muro...? ¿Es la separación reglamentaria...?
El
video captado por la cámara instalada a la derecha de la carretera, yendo de
sur a norte, demuestra algo importante.
Aparte
de las nítidas imágenes que registran el funesto suceso y perennizan el
instante exacto, se revelan otros detalles.
Por
ejemplo, que el local al que pertenece la cámara guarda mayor amplitud hacia la
cinta asfáltica que el su costado.
La
ilustración muestra que su vecino, en afán expansionista, se proyecta varios
centímetros hacia afuera. Más cerca la pista. Al peligro.
La
misma producción fílmica señala que. en el margen izquierdo. los propietarios
han hecho lo mismo. Han dejado un espacio reducido.
Esto
distorsiona por completo las normas que existen en todo el mundo respecto a las
autopistas.
Por
razones no solo de seguridad, sino de ornato urbanístico y diseño arquitectónico,
deben respetarse amplios márgenes a ambos lados.
Hay
países donde las distancias son mayores con la finalidad de facilitar el
tránsito y preservar a las personas que viven o se movilizan en las cercanías.
Y,
si las áreas de ingreso están pobladas, como en este caso, se construyen
veredas, instalan semáforos, pintan líneas peatonales y demás.
No
solo eso. La entrada de la ciudad es considerada como la sala de una casa y se
esmeran en presentarla de manera óptima.
Construyen
óvalos ornamentales, rotondas, siembran gras y árboles. Embellecen la puerta de
la población.
¿Qué
pasó con el ingreso sur de Trujillo...? ¿Quién debió controlar que las
edificaciones y muros se levanten en el espacio adecuado...?
El
descuido de las autoridades y la irresponsabilidad de algunos propietarios es
la causa que nuestra ciudad ofrezca esa cara tan fea.
Ojalá
que este triste acontecimiento permita reflexionar y proponernos que Trujillo
luzca una mejor apariencia en esta importante zona...
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