¡Perú, sin Paolo...!

Paolo Guerrero, con su liderazgo y sus goles, hizo que Perú asista al Mundial de Rusia. (AFP).

          La noticia deportiva que jamás quisimos conocer circuló como reguero de pólvora desde la mañana de hoy.

          Paolo Guerrero, capitán y goleador histórico de la selección nacional, no estará en el Mundial de fútbol que empieza dentro de un mes.

          El Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) acató el pedido de la Agencia Mundial Antidopaje (WADA) y amplió la sanción impuesta a 14 meses.

          Según esta decisión, el ariete peruano solo podrá volver a las canchas en enero del año próximo.

          Sus abogados no pudieron acreditar su inocencia por aquel resultado que dio positivo en el control antidopaje luego del partido con Argentina.

          Paolo convirtió muchos goles, incluyendo el tiro libre del empate ante Colombia en Lima que permitió a Perú jugar el repechaje con Nueva Zelanda.

          El castigo impuesto semanas después le impidió jugar en esos duelos que nos otorgaron el boleto al Mundial.

          Quien más pierde con esta pena es la blanquirroja cuyo entrenador consideró siempre al ariete en la lista de los convocados.

          La hinchada ya soñaba con la dupla Guerrero-Farfán burlando y haciendo trizas las defensas contrarias con la bicolor en el pecho.

          Por esas cosas que tiene el destino, la afición estará privada del ansiado espectáculo.

          Frente a esta circunstancia, corresponde ahora a Gareca establecer un sistema de juego que faculte superar su ausencia.

          Mientras, queda en los 23 escogidos defender el prestigio del fútbol peruano y brindarnos alegrías para aliviar los golpes bajos de la política.

          Guerrero se convirtió en el artillero peruano, y de los clubes que jugó, por su particular manera de dominar, conducir el balón y hacer goles.

          Sabe actuar con las partes del cuerpo que el reglamento permite. Incluso sin pelota, ubicándose en el lugar apropiado para recibir, fusilar al arquero y anotar.

          Su coraje, pundonor y valentía, que no verá el mundo, serán extrañados en Rusia 2018. Porque Perú jugará sin su ídolo máximo: Paolo Guerrero...