lunes, 5 de diciembre de 2016

¡Racing acaricia el cielo...!

Racing Club de Huamachuco se impuso al Binacional de Arequipa y tiene chance en la Copa Perú. (Líbero).


          No podía ser más auspicioso el debut del Racing Club de Huamachuco en la finalísima de la Copa Perú.

          En el inicio del cuadrangular, fue el único equipo que salió sonriendo del estadio Nacional al superar al Binacional de Arequipa por uno a cero

          El once liberteño ingresó al gramado sabiendo que antes, Deportivo Hualgayoc de Cajamarca y Sport Rosario de Ancash, sus próximos adversarios, habían empatado.

          Esa igualdad era una motivación especial. La victoria los colocaba arriba.

          Y las cosas se empezaron a dar a los 14' cuando un fuerte disparo desde fuera del área de Jáuregui, no pudo ser detenido por el golero Torres.

          Con la tranquilidad que otorga la ventaja, el cuadro rojo siguió en lo suyo. Acosando la valla contraria ante la angustia del equipo sureño.

          Continuó con la misma intención en el complemento hasta que, a los 13', Iglesias fuerza una acción, levanta la pierna demasiado y golpea en el rostro a un adversario.

          El juez le muestra la amarilla, pero como ya tenía una, le saca la roja y lo expulsa. Faltaba más de media hora y parecía que se venía la noche.

          Replanteo urgente y a resistir con diez la arremetida de once.

          Es en esos momentos difíciles que sale a relucir la figura del arquero Díaz que a los 25' y 43' salva dos "mano a mano" decisivos.

          La defensa y los volantes retrasados ponen fuerza con acciones al límite y acumulan cinco amarillas que pueden alterar la alineación en lo que resta.

          Por lo visto el sábado, el elenco huamachuquino requiere perfilar algunos puntos en su esquema de juego.

          Asegurar el servicio al compañero para evitar que llegue a los pies del rival, según la circunstancias soltar rápido el balón y jugar tocándola sin retenerla demasiado.

          Juntarse más. El fútbol es un deporte colectivo. Se vieron momentos en que quien llevaba la pelota no tenía un compañero cerca y terminaba perdiéndola.

          Por lo demás, todo bien. Con este triunfo, Racing acaricia el cielo...

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