Momento crucial. El duelo está 0 a 0. Cueva dispara el penal. El portero se lanza a la izquierda y el balón se enfila hacia las nubes. (AP).
Uno
no sabe cómo oprimir los semidados del teclado cuando se pierde como ayer perdió
Perú ante Dinamarca.
Porque
la bicolor no se achicó en ningún momento. Desplegó el juego que nos cautivó
desde el inicio. Puso el fútbol.
Antes
de los 15' ya había tentado el arco contrario con varios remates desde fuera
del área y un disparo de Carrillo que exigió al portero adversario.
Luego,
los daneses se soltaron un poco, aunque sin inquietar con peligro la valla nacional.
Recuperamos
la pelota y, en una jugada en profundidad, Cueva es trabado. Él mismo lo
ejecuta y, con el arquero vencido, la tira afuera.
Tras
el descanso, el equipo ingresa animoso pero, en una contra nos encuentran mal
parados atrás y recibimos el único gol del duelo.
Guerrero
ingresa por Flores y la blanquirroja adquiere mayor poder ofensivo. Unos opinan
que debió estar desde el saque.
El
goleador tuvo la más clara cuando intentó de taco y el balón pasó besando el
poste izquierdo.
Allí
aparece la figura del meta Schemeichel neutralizando todos los disparos
peruanos.
Antes
del final Gallese tuvo otro mano a mano con
un europeo. Su experiencia nos salvó del segundo.
Tapia,
que destacó en otras jornadas, esta vez estuvo errático. Advíncula lo hizo
bien, aunque por su zona fue el tanto en contra.
Cerrado
el capítulo, ahora es indispensable levantar el ánimo. Recuperarse lo más
pronto y ver lo que nos queda por delante.
Francia
sufrió para imponerse a Australia. Cuando fue apretado mostró que se le puede
hacer daño.
Perú
debe hacer lo que sabe. Volver al juego corto con la pelota pegada al piso y
retomar la contundencia que lo caracteriza.
No
hay mucho tiempo para pensar, el choque con los galos es a mitad de semana. Hay
que prepararse física y mentalmente.
Aún
estamos vivos. ¡Quedan dos partidos...!
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